Discurso de orden
Ceremonia de homenaje póstumo al Dr. Carlos Bazán Zender
Dr. Alejandro Rosell
Señor Decano del Colegio Médico del Perú, Dr. Miguel Palacios Celi
dra. azucena Dávila málaga, presidenta de la academia peruana de cirugía.
Dr. Héctor Mondragón Arrascue, presidente de la sociedad peruana de cirugía pediátrica del Perú.
señores académicos, familiares y amigos del Dr. Carlos Bazán Zender, señoras y señores.
Hoy miércoles 12 de agosto del 2020, hemos sido convocados e invitados por la academia peruana de cirugía, a esta sesión extraordinaria, se lleva a cabo en unas condiciones peculiares, sirviéndonos de la nueva tecnología, obligados por la particular pandemia que viene afectando al mundo entero y con gran repercusión y fuerza en nuestro país y que nos impide poderlo hacer en forma presencial.
Nos servimos de esta llamada plataforma virtual, la que, si bien nos permite convocarlos, sin embargo, la convierte en una sesión en cierta forma fría.
Expresar los sentimientos, hablando frente a una pantalla de computadora y recibir las palabras a través de algún medio de contacto, que puede ser otra pantalla de computadora, de una Tablet o de un teléfono celular, en ambientes muy variados y a solas, hace difícil percibir las emociones y sentimientos del auditorio, en especial cuando se tiene que hacer un homenaje a una persona tan extraordinaria como fue el doctor Carlos Bazán zender.
La academia peruana de cirugía dentro de una de sus más importantes funciones tiene la misión de marcar y hacer conocer los hechos y personajes que de una u otra forma deben ser conocidos por el pueblo peruano. hacer público el reconocimiento de los cirujanos que por su personalidad, trabajo, honradez y aportes que han hecho por el país son dignos merecedores de integrar el grupo de hombres que permanecerán en las páginas de la historia de la medicina peruana.
En esta ocasión se me ha dado la inmerecida responsabilidad de hacer una reseña del doctor Carlos Bazán zender, quien ha pasado a integrar la lista de los médicos que han hecho historia y que merece ser considerado como ejemplo de dedicación, trabajo, entrega y amor por nuestro país y nuestras instituciones.
Tuve la suerte de conocer al doctor Carlos Bazán, allá por el año 1971, cuando hacía mi internado de pediatría en el hospital del niño de la avenida Brasil. el doctor Bazán en ese entonces hacía poco tiempo que había regresado de Inglaterra a donde se había ido para hacerse especialista en cirugía pediátrica con especial énfasis en la cirugía perinatal.
En una guardia fui convocado por el doctor Bazán para que entregara el equipo quirúrgico en una cirugía de urgencia de un niño de un mes de nacido, por supuesto que mi participación fue como un segundo asistente. se trataba de un niño con una estenosis congénita del píloro. mi participación fue más como observador que como cirujano. quedé impresionado de la forma tan bella, limpia y armoniosa como fue ejecutada la cirugía.
Todos los que han conocido al doctor Carlos Bazán, saben cómo era su carácter, muy franco, directo, abierto, sincero y además tenía la gran virtud de ser un gran conversador, con un profundo deseo de conocer a las personas. en la conversación que se desarrolló después de la cirugía, salió a lucir la coincidencia que ambos habíamos estudiado en el mismo colegio san isidro de los hermanos maristas, esto fue suficiente para que se iniciase una amistad y confraternidad que ha permanecido hasta el día que sorpresivamente nos dejó.
Nuestra convivencia ha sido cercana por más de 30 años, la razón es que por esos azahares de la vida coincidimos en la clínica san Felipe, en la torre dos de consultorios, éramos vecinos, pared por medio en el cuarto piso. puedo decir que nos veíamos casi todos los días laborables, aparte siempre fue un permanente integrante de la junta de propietarios en donde nos apoyó con toda su experiencia y sabiduría.
También nos encontrábamos en el centro quirúrgico con bastante frecuencia, incluso pocos días antes de su partida, volví a verlo operar, como curioso, en un caso complejo y complicado de cirugía pediátrica. Carlos ya tenía 81 años y volví a admirar su fineza, limpieza, pulcritud y arte como realizó la cirugía, conservando el mismo entusiasmo y la misma seguridad del cirujano que conocí en el año 1971.
Si fríamente relatara, los hechos más referentes de su hoja de vida señalando que nació en Piura el 22 de diciembre del 1937, que falleció en lima el 11 de setiembre del 2019, que sus padres fueron el doctor Carlos Bazán miranda y la señora paula zender honigman, que estudió en el colegio maristas san isidro en donde fue un destacado alumno, luego sin dificultad ingresó a la universidad para estudiar medicina en la facultad de san Fernando etc., etc. sería un relato frio.
Don Carlos Bazán Zender fue un joven muy inquieto, definió ser médico posiblemente siguiendo el ejemplo de su padre, ingresó a San Marcos a la facultad de medicina de san Fernando en donde cursó su carrera sin problemas y sin tropiezos.
Cuando ingresa a la universidad, según relató en una entrevista al diario expreso, estando en el segundo año de pre médicas, en el año 1956. Fernando Belaunde irrumpía en la política con fuerza, el relata que quedó subyugado por los valores, personalidad y principios de don Fernando Belaunde. durante su vida universitaria participó poco en la política, se dedicó más a estudiar, pero finalmente en el joven y naciente partido político, acción popular, el relata que la víspera de graduarse de médico se inscribió en el partido en el año 1963, al inicio del primer gobierno de Fernando Belaunde y allí permaneció para siempre.
El joven y reciente médico, siempre tuvo una especial atracción por la cirugía, al poco tiempo de graduado se decide y no existiendo en esos tiempos en el país, ningún sistema de especialización ni residentado decide viajar al extranjero y se genera un lapso de varios años en que se dedica a perfeccionarse, posiblemente luego de pensarlo y meditarlo viaja a Londres en donde se especialista como cirujano pediátrico con énfasis en cirugía perinatal, esto lo hace en la universidad de Londres en el great ormond street hospital for sick children.
Regresa al Perú a trabajar en el hospital de niño den donde al inicio le fue difícil romper los esquemas, hábitos y costumbres, pero gracias a su paciencia, empeño y tesón finalmente crea el primer servicio de cirugía pediátrica neonatal, en donde como jefe lo desarrolla y empieza a tener sus primeros pupilos y seguidores a quienes les enseñó todo, sin guardarse ningún secreto, sin egoísmos ni buscando alabanzas es allí donde nacen los nuevos cirujanos pediátricos.
Gracias a su honradez, visión, sinceridad no creo ningún enemigo, solo sembró y cosechó innumerables amigos y discípulos. por todas y muchas más razones y virtudes pasó luego a ser director del hospital del niño durante 1981 y 1982. estando en este cargo y por su compromiso fiel y leal con su partido acción popular en 1982 fue convocado y nombrado viceministro de salud, siendo ministro el doctor juan franco Ponce, durante el segundo gobierno del presidente Fernando Belaunde.
El 25 de marzo del 1985, asciende al cargo de ministro de salud, en donde desarrolló una grande y reconocida labor, consiguiendo muchos logros, puso mucho énfasis en la primera línea de atención de la salud, intensificó las campañas de vacunación, se comprometió y firmó en la ops el plan de erradicación de la poliomielitis en américa, compromiso que se cumplió. completó e inauguró los nuevos hospitales de Iquitos y la maría auxiliadora en el sur de lima, modernizó y creó el hospital de emergencias pediátricas en la antigua asistencia pública de graú en lima. tuvo inmensos logros y fue uno de los buenos momentos de desarrollo del sistema de salud dependiente del ministerio en el que él dirigía.
Pero su actividad incansable y promotora hizo que tuviese una gran participación en las instituciones científicas, fue presidente de la sociedad de pediatría del Perú entre el 1978 y 1980, presidente de la sociedad de cirugía pediátrica del Perú 1986 – 1988, organizando el congreso panamericano de cirugía pediátrica 1988 en cuzco y lima.
Director médico de la clínica san Felipe por muchos años.
Por sus incontables méritos ha sido reconocido como miembro honorario de muchas sociedades de cirugía pediátrica en casi todos los países de américa y Europa. ha sido asesor permanente de la fundación Hipólito Unanue y hay muchas otros cargos y funciones que ha desempeñado en la municipalidad de san isidro, en la municipalidad de lima, etc.
Sus otras pasiones el futbol, apasionado hincha de universitario de deportes, pero inmenso colaborador en la federación peruana de futbol y la Conmebol, ejerciendo cargos diversos, preocupándose mucho por la salud y riesgos propios de la práctica de este deporte.
Los toros de lidia y el arte de la tauromaquia, es otro de los capítulos que podría tomarnos largo rato en relatar toda su afición, preocupación y pasión por este arte. conocido y experto conocedor de la historia de este arte, publicando un hermoso libro sobre la historia de los toros en el Perú.
Luego su familia, con sus 6 hijos, 5 de su primer matrimonio, Silvia, Marisa, Carlos Alberto, Mónica y paloma y 1 del segundo, francisco el popular paco más sus amados nietos. sin poder dejar de mencionar su apasionado y eterno amor por Beatriz que según leyenda nació desde la más temprana edad.
El final lo sorprendió y nos sorprendió, nunca se sintió adulto mayor, a los 81 años aceptó el reto de la presidencia del sisol salud, programa de la municipalidad de lima, el nuevo alcalde Jorge muñoz lo invita para que reactivara esta entidad, en los algo de 6 meses en que tenía lo reorganizó, reestructuró y la saneo poniéndola en óptimo funcionamiento. es así como lo sorprendió el destino, trabajando, operando y sembrando por el bien del país y su ciudad.
Son numerosos los reconocimientos y distinciones que ha tenido pero los que no aparecen en su hoja de vida son los sentimientos de admiración que le tuvieron sus hijos, sus nietos, su amada Beatriz y familiares e innumerables amigos.
Las decenas de cirujanos pediátricos a quienes les enseñó y formó, dándoles todos los secretos de su conocimiento y arte de cirujano.
Los miles de paciente agradecidos por haberles devuelto la salud y los millones de peruanos que han sido favorecidos por su labor como médico, ministro con su entrega continua por hacer de nuestro Perú un país digno y unido.
Doctor Carlos Bazán Zender, usted vive en el corazón de muchos peruanos, le estamos profundamente agradecidos, las palabras faltan para expresar lo que lo extrañamos, para agradecerle. solo quisiéramos que muchos peruanos lo imiten y continúen sus sueños de un Perú grande y unido.
Gracias
